24 de agosto de 2010

La Guerra de los SESOS

Ando ahorita metida en una lucha interna bien heavy. Inesperada, por demás.

Cuando pase la tormenta, volveré a centrarme y seguiré encaminando mi mente hacia dónde sea que me toque. Por ahora, me disculpo de antemano por lo que pueda venir por ahí.

Aquí les dejo una imagen bien explicativa:


Pronto estaré anunciando al ganador.

Cómo convertir un "Magno Evento" en un "¡Más-no! Evento"

INGREDIENTES:

- 1 Apartamento solo

- 1 Excusa para reunirse (Puede ser la transmisión del Miss Universo)

- 6 Mujeres que se conocen de toda la vida

- 2 Guayabos

- 1 Medio despecho

- 1 Sutil pique entre féminas

- 1 Botella de vino blanco

- 2 Botellas de vino tinto

- 1 Botella de "Aguardiente gallego"

- 1 iPod con sus cornetas

- Veneno al gusto


PREPARACIÓN:

Lleve a las seis (6) mujeres al apartamento solo en cuestión, previamente acondicionado y ventilado. Abra una (1) botella de vino y prenda el televisor a la mitad del Miss Universo. No olvide criticar periódicamente a alguna miss para que la mezcla no se ablande.

Luego de que finalice el programa en la TV, apáguela, prenda el iPod, vaya a "Música" - "Artistas"- "Alanis Morissette" y presione PLAY.

En esta fase es bueno que saque el resto de las botellas de vino y demás bebidas alcohólicas, las ponga en medio de las mujeres -que ya para este punto habrán soltado bastante veneno- y deje que la conversación sobre misses repose.

Luego escuche atentamente, ya que la transición de temas, la disminución del nivel de líquido en las botellas y el desenfado con el que se dejaron de usar los vasos y se pasó a beber "de pico", le indicará cómo está cuajando la mezcla.

Cuando al menos cuatro (4) de las mujeres se levanten a bailar, surja algún "estoy burrrrrrda de mareada, marica" y alguna lloriquee un poquito a causa de algún hombre mientras el resto le aconsejan cosas como "Marica, si lo ves, no lo beses ¡La vas a cagar!"; ya puede abrir la puerta del apartamento y disfrutar de su desmadre/pea del día lunes.


ADVERTENCIA: Puede causar ratón, sueño, torpeza y la toma de malas decisiones al día siguiente.



... ¡Ah sí! Marelisa Gibson quedó detrás de la ambulancia, con todo y el traje de ventilador de aluminio que le hicieron.

21 de agosto de 2010

De Marte y de Venus

Él: "Me gusta, pero se está poniendo muy difícil"
Ella: "Me gusta porque cada vez se está poniendo más difícil"

Él: "Ahorita no, estoy viendo el juego"
Ella: "Ahorita no, estoy en mis días"

Él: "Voy a salir con mis panas, ¿quieres venir?"
Ella: "Voy a salir con mis amigas a hablar de hombres, nos vemos mañana"

Él: "Es que no quiero comprometerme"
Ella: "Es que no quiero que sepa que no quiero comprometerme tampoco"

Él: "Las mujeres son muy enrolladas"
Ella: "Los hombres son muy básicos"

Él: "Ellas sólo son mis amigas"
Ella: "Amigo el ratón del queso"

Él: "Amigos antes que mujeres" (Bros before Hoes)
Ella: "Mi amiga seguramente no quiere que sea feliz, me tiene envidia, pero lo amo"

Él: "No importa, unas cervezas y se me pasa"
Ella: "Me siento horrible, nunca lo voy a poder superar... me emborracharé"

Él: "Comí como un cochino, estoy full... ¿Qué hay de postre?"
Ella: "Esa ensalada me dejó llena... unas galleticas de soda más y ya"

Él: "Está buena"
Ella: "No sé... es normal, pero tiene lindos ojos (o cabello, o nariz, o ropa)"

Él: "Bueno pana, olvídala y ya... ven te picho a una amiga"
Ella: "¡Ay chama! Es que todos los hombres son iguales... estás mejor sola"

Él: "Estás como vuelto m?$#%@"
Ella: "No bella, no te ves fea... ¡esa camisa es linda!"

Él: "No... no me enteré de eso. ¿Viste el juego ayer?"
Ella: "Noooo ¿qué pasó? Cuéntamelo todo... ¡que no se te olvide nada!"

Él: "Bueno, esas cosas pasan... ¿Viste el juego ayer?"
Ella: "Bueno amiga, pero sabes que cuentas conmigo para lo que sea ¿ok?"

Él: "Creo que esta chama va para algo serio"
Ella: "Nos vamos a casar en otoño y la Luna de Miel será en Hawaii" o "Algo ya no está bien, no sé... ya no hay chispa"

Ella: "Creo que ya las cosas no están funcionando, deberíamos ver a otras personas"
Él: "Eh... ¿o sea que antes no podíamos ver a otras personas?"

Él: "¿A qué hora es que te tenía que pasar buscando?"
Ella: "Me viene a buscar a las 8... a las 6 me tengo que secar el cabello, para empezar a vestirme a las 7, a las 7:30 saber que me voy a poner, estar lista a las 8:15... No importa que me espere un poquito"

Él dice: "Te quiero" Piensa: "Seguro con eso la mato"
Ella dice: "Yo también" Piensa: "¡AAHHHH! ¡Si no lo sintiera, no lo dijera!... ¡De verdad me quiere!"

- Luego viene lo de "No eres tú, soy yo" o cualquiera de sus célebres variaciones: "Es que necesito pensarlo", "No quiero hacerte daño", "Eres demasiado especial, pero vives muy lejos"-

Él: "No eres tú, soy yo... pero podemos ser amigos"
Ella: "¿Cómo no voy a ser yo, si es conmigo con quién no quieres estar?"

Él dice: "No, claro que no hay nadie más, el problema soy yo" Piensa: "No se puede enterar de que hay alguien más"
Ella dice: "Ah bueno... está bien" Piensa: "Sabía que había alguien más... ¡Malparido! Seguro es [INSERTE NOMBRE DE AMIGA DE ÉL AQUÍ]"


... Y así podría continuar por muchas más líneas.

Esto no quiere decir que unos estén mal y otros bien, sólo acentúa algunas diferencias y reafirma una verdad indiscutible: al final del día, los opuestos se atraen.


La Carta

Dearest Cecilia,

The story can resume. The one I had been planning on that evening walk. I can become again the man who once crossed the surrey park at dusk, in my best suit, swaggering on the promise of life. The man who, with the clarity of passion, made love to you in the library. The story can resume. I will return. Find you, love you, marry you and live without shame.

Robbie.



[Fragmento de la película Atonement (2007), carta que le escribe Robbie Turner (James McAvoy) a Cecilia Tallis (Keira Knightley) mientras está cumpliendo con su sentencia como soldado en Francia, durante la Segunda Guerra Mundial]

19 de agosto de 2010

Momentos "No-no"

A nosotros los latinoamericanos nos encanta criticar la cultura gringa, que es consumista, que son superficiales, que se creen los dueños del mundo (y más o menos lo son) y bla bla bla... Pero lo que nunca les podremos quitar es que tienen una facilidad increíble para inventar frases, francamente, geniales sobre la vida cotidiana.

Una que en particular siempre me ha gustado es "Ooohhh, man... That's a no-no" pero dicho así con los labios apretados, mirada de ligera superioridad y con una pizca de condescendencia.

El "no-no" no es tan común en el uso coloquial, (estoy segura de que lo escuché en Friends o algun otro sitcom) pero aplica perfecto para infinidad de situaciones en las que, quizás, decir "Amigo, estás meando fuera del perol" o "Estás más pelado que rodilla de chivo" represente una terrible falta de elegancia. El "no-no" (nou-nou) puede ser usado para indicarle a otro un error cometido o por cometer.

Citemos algunos ejemplos, shall we?

-
Estás en los probadores de Zara con una amiga que se está probando unos skinny jeans que, to be honest, son más skinny que ella. Tu amiga sale del probador con dicha prenda puesta y el botón en su cintura está a punto de reventar, pero ella parece no notarlo. Tú: "Ay amiga... creo que es un no-no"

- Amigo(a) enguayabado(a) te pregunta si debe escribirle al (la) ex con quien terminó hace meses en medio de una rumba y después de una ronda de licores varios. Tú: "¡Eh-eh-eh! That's a no-no"

- Tienes una amiga morena que quiere pintarse el cabello de rubio. Tú: "MAJOR NO-NO!"

- Escuchas a alguien que le recomienda a otro inacuto que se compre un Blackberry en Digitel. Tú: "Disculpa, hermano: DI que mientes, DI que robas, DI... no-no"

- En el trabajo. Estás en la computadora, ocupándote de tus asuntos, cuando sientes una oscura presencia a tus espaldas, te volteas y ¡oh-oh! es el baboso de la oficina y viene a preguntarte si quieres acompañarlo a almorzar. Tú: [Mientras te deslizas velozmente lejos del ser] "¡Uy perdón! Pero como que no-no"


Estoy firmemente convencida de que si se logra divulgar el uso del "no-no" para salir de situaciones incómodas, hacerle ver a otros sus errores y no perder la elegancia en el intento, el mundo sería un lugar mejor.


(Creo que este post es un poco "no-no" en mi blog... pero what da hell?)


Karma goes both ways

Confieso que cada vez que me entero (siempre sin querer, porque en serio prefiero no saber de ti) de que te cayeron las 7 plagas de Egipto, al contrario de lo que la gente piensa, no me alegro ni un poquito.

Soy de esas pendejas que luego de sufrir ataques de migraña por la rabia que da recordar como le llenaron la cabeza de PAJA y la dejaron ante el mundo como una ESTÚPIDA, todavía puede sufrir bajas de tensión por la preocupación de no saber si estás bien o no.

Soy de las pendejas que casi clavan el parcial más maldito de toda su carrera, porque 30min antes de entrar al salón se enteraron que te robaron hasta el alma a punta de pistola.

Soy de las pendejas que encierran a su sentido común en un closet y van y te escriben por Facebook desde su Blackberry para saber cómo estás, a pesar de que se juraron a sí mismas no hacerlo más nunca y sabiendo que, en efecto, responderías con un muy poco elaborado "tranqui, todo bien".

Soy de las pendejas que aún -no siempre, pero casi- se levantan a revisar el celular esperando un mensaje que le diga que AL FIN el Espíritu Santo te iluminó y te diste cuenta de que LA CAGASTE.

Soy de las pendejas que aún se preocupan porque no te estreses con las cosas del trabajo, que te ofrecen ayuda y que se les pone el corazón como una pasa cuando se tienen que despedir de ti.

Soy de las pendejas que cuando te ven les tiemblan las manos y no te ven a la cara para disimular que se les pusieron rojas hasta las orejas y que tienen los ojos aguados.

Soy de las pendejas que huelen tu colonia, se les acelera el corazón y se les abre un hueco en el estómago.

Soy de las pendejas que evitan pensar que en cualquier momento te va a llegar otra, porque es causa de llanto seguro.

Soy de las pendejas que se prometieron dejar de poner la cómica ventilando su guayabo, pero aquí están.


Así que mientras tú te recuperas de tus robos, tus enfermedades, tu estrés laboral y tus almuerzos solo; por aquí hay otra de esas pendejas que también la están pasando MUY mal.

(Aunque usted no lo crea, este post fue concebido de una manera muy distinta, pero así salió al final. My bad!)

17 de agosto de 2010

¡Quiero viajar!

Pero viajar en serio, como Dios manda: en avión y fuera de aquí.

Ya van 10 años en los que no he salido del país, al menos 8 en los que no me he montado en un avión y mínimo un semestre que no salgo de Caracas (¡En serio! No recuerdo la última vez que fui a la playa... ¡Por las cholas de Mahoma, ya ni tengo marca de traje de baño!)

Si alguna de esas personas que ganan millas de "viajero frecuente" -si es que eso aún existe- lee esto, puede que se escandalice de mi precaria situación de movilidad geográfica. Pero para los que me conocen es una situación no sólo normal, sino perenne.

Toda mi vida he vivido en el oeste de Caracas, estudié en un colegio en El Paraíso y luego en la UCAB, ni siquiera viví esa parte de la experiencia universitaria de llegar tarde a clases por las colas o por un atascón de gente en el Metro.

Cuando era colegiala llegaba a clases en 30 minutos si, y solo si, había una catástrofe terrible en la Av. Páez y para ir a la UCAB me tardaba (sin exagerar) 5 minutos en Metrobus. Es evidente que mis padres nunca quisieron que me alejara mucho del nido.

Ahora, por cuestiones de trabajo, he ampliado mis horizontes a 18 estaciones de Metro o su equivalente en la superficie: 1h 30min en taxi, sólo desde mi casa a la oficina. Esta es una confesión digna de una gran L en mi frente, al más puro estilo de la presentación de Glee -grupo del cual sólo podría formar parte por ser loser y seguro sería back-up dancer- ¿pero qué se le va a hacer? Así ha sido mi realidad.

Desde mis 15 años la necesidad de volver a viajar se me ha vuelto casi insoportable. Ese año, recuerdo que había logrado convencer a mis padres de que me mandaran a un crucero de quinceañeras como había querido toda la vida, pero el Tío Chávez decidió hincharle tanto las pelotas a la oposición que convocaron al famoso e infame paro laboral. Evidentemente, le dije adiós a mi viaje y me conformé con que el gran acontecimiento de mis 15 años fuera conseguir 3 botellas de Coca-Cola en medio de la escasez. Dato curioso: Yo no tomo Coca-Cola.

En fin, esas pequeñas cositas de mi historial de vida, sumadas al hecho de que pasar demasiado tiempo revoloteando en el caos caraqueño vuelve loco a cualquiera (incluso sin ponerse a ver Globovisión todas las noches) me hicieron llegar al punto de no retorno -metafóricamente hablando- ya no es un capricho, es una necesidad: Laura tiene que viajar.

El sólo pensar en hacer maletas grandes, oler mi pasaporte (todavía huele a papel nuevo), pisar Maiquetía sabiendo que no voy a recibir a nadie, incluso pasar roncha cuando el vuelo se retrase, hace que se me vuelva agua la boca y se me acelere el corazón.

Es hora de que Laura viaje, conozca lugares nuevos, aprenda nuevas palabras, se tome fotos en sitios turísticos, diga: "soy de Venezuela" y cuando le pregunten por Chávez diga que prefiere hablar de las misses y lo feo de sus trajes típicos, se invente un nombre y una vida aventurera para agarrarse a un extranjero que no verá más nunca y que, sobre todo, pueda tener la hermosa sensación de que al menos por un tiempo puede comenzar de cero, sin rollos ni preocupaciones, en un lugar bien lejano.

Meta de este año: Montarme en un avión y viajar. He dicho.

16 de agosto de 2010

Drenando ando

ADVERTENCIA: Este no es un post feliz, así que si le molesta la gente emo/depre/hormonal, le recomiendo que deje de leer ahora.

- Pienso que en el mundo hay dos tipos de personas: las que están hechas para las relaciones y las que no. Yo cada día me convenzo más que soy de las que no.
- Soy mejor haciendo creer que estoy bien, que haciendo un esfuerzo por estarlo.
- Busco demasiado la aprobación de los demás, beyond sanity.
- No soy mala perdedora, soy LA PEOR perdedora que hay.
- Siempre digo que soy demasiado orgullosa, pero cuando intento no serlo algo me recuerda que el orgullo es la mejor defensa.
- Cada vez que siento que hay algo realmente valioso en mí, siento que lo pierdo.
- Mi casa suele ser el último lugar en el que quiero estar.
- Cuando me gusta alguien hago todo lo humanamente posible para espantarlo.
- Soy inadmisiblemente floja.
- Me da miedo correr riesgos.
- De los errores que he cometido, los que más me pesan son aquellos en los que confié en otro.
- Paradójicamente, se me hace más fácil poner mi felicidad en manos de los demás.
- La mejor manera que conozco para lidiar con el dolor es huyendo de él.
- Aún me levanto sintiendo un hueco en el estómago de lo mucho que te extraño. Y mientras más falta me haces, más rabia me da saber que para ti y para los demás es una estupidez.
- Nunca estoy segura de nada y nunca sé qué hacer.
- Si escribiera todos los planes que tengo, tendría un cuarto lleno de papeles y seguramente se quedarían guardados.
- Odio creer que yo invoco lo malo que me pasa, pero parece la única explicación.
- Sé que me dejo nublar por el pesimismo, pero pensar que hay gente que vive peor que yo, no me hace sentir mejor. Cada quien carga con su propia cruz.
- Me paso la vida entre parecer fuerte y sentirme totalmente desolada.
- Tengo problemas con la intimidad física y emocional.
- Estoy bastante segura de que necesito ir a un psicólogo, pero creo que nunca lo haré.
- Sé que cuando termine de escribir esta entrada y la publique, la odiaré con todo mi ser.
- Siento que ya no hago bien las cosas para las que era buena.
- Todo el tiempo pienso que soy diferente a todo el mundo (not in a good way)
- Envidio a la gente feliz y me molesta la gente que no se cansa de demostrarlo.
- No suelo juzgar a los demás, pero puedo descuartizarme a mí misma.
- Aunque sé que no existen "leyes de vida", me las invento.
- Si la palabra bipolar viniera con una ilustración, estoy segura que sería mi foto.
- No eres la causa de todos mis males, pero definitivamente eres el que me recordó que ahí estaban.
- Le tengo miedo a la confrontación.
- Me cuesta mucho expresarme hablando.
- Lloro mucho más de lo que debería.
- Me costó un poco más de un año convencerme que yo estoy primero en mi lista de prioridades, pero solo unos meses para olvidarlo.
- Puedo decir con toda propiedad que si hay alguien que se da cuenta de sus errores, soy yo.
- Aún no he publicado esta entrada y ya la estoy odiando.

Hace poco me dijeron "Amiga, la gente quiere ver sangre", si es así, bueno... te la tengo. Hopefully mañana me levantaré en mi querido estado de negación y haré unos chistecitos por ahí.

Good night and good luck.-

13 de agosto de 2010

No-tan-sutiles indirectas

Esta entrada, como la estoy concibiendo en mi cabeza, viene a ser algo así como un servicio público. Tanto para mujeres, como para hombres.

Inevitablemente, en las relaciones amorosas/me-gustas/resuelve/platónicas siempre estamos en alguno de estos status: interesado(a), malpegado(a), el(la) que rechaza o rechazado(a). Lo importante es saber qué vela cargamos en ese entierro (o si no cargamos ninguna, porque también se ha visto el caso)

La fórmula perfecta: Cuando se encuentran dos interesados.

Amigo, amiga: si el objeto de su deseo está interesado en usted, no es necesario que lo analice mucho, las señales son muy claras.

Si te escribe/llama con cierta frecuencia, está interesado. Si te cuenta de su día o te pregunta por el tuyo, está interesado. Si se ofrece a ayudarte cuando tienes un problema a pesar de que no lo pides, está interesado. Si te invita a salir, está interesado. Si te recuerda las cosas que le dices con bastante detalle, está interesado.

Si este no es el caso de su potencial media naranja, deje eso así y vaya a echarle los canes a otra víctima.

Los malpegados o los ciegos-sordos-mudos

Son los que se agarran del más ínfimo detalle de atención hacia su persona como si fuera una propuesta de matrimonio. Es triste, pero hasta cierto punto comprensible. (¡Ay vamos! ¡No nos engañemos! Quien no haya estado malpegado nunca que tire la primera piedra)

El catch aquí está en saber reconocer cuando estás en esta penosa situación. Así que citaré algunos ejemplos extraídos de la vida real (¡Hey, hey! No he dicho "mi vida")

Si le haces caso a tu mente cuando te dice "Escríbele, ¿qué puedes perder? a todo el mundo le gusta que se acuerden de uno" y vas y le haces caso, es MUY probable que estés malpegado(a): cuando tienes que pensar mucho antes de hacer algo, es porque algo dentro de ti te dice que no deberías hacerlo.

Si te has "cachado" soñando despierto(a) con la otra persona, imaginando lo genial que sería si estuvieran juntos -o peor, lo genial que SERÁ cuando lo estén- es probable que estés malpegado(a)

Si te emocionas cada vez que te escribe/llama así sea para pedirte el número de teléfono de otra persona, estás malpegado(a)

Lo importante en esta situación es saber cuando parar, si no está recibiendo las señales indicadas o está ignorando las señales que le indican que usted no es la persona amada, es momento de echarse solvente y remover ese malpegue.

La tarea difícil: El(La) que rechaza

En este status no hay realmente una forma de salir airoso o de proteger los sentimientos del otro. Es, sin duda, la tarea más incómoda y es importante que usted asuma con dignidad y voluntad férrea el barranco por el que se está lanzando. De este punto en adelante, usted no será una persona grata.

Primero, es importante tener en cuenta que la salida más fácil -huir o "hacerse el paisa"- no es necesariamente la más efectiva. Siempre habrán malpegaditos que tomarán eso como un código para "sé más perseverante".

Segundo, inventarse un pretendiente, puede que desemboque en un enredo de mentiras que le pueden explotar en la cara y dejar los sentimientos de la otra persona aún más heridos.

Lo que yo recomiendo en estos casos, si las sutiles indirectas (no te contesto, no te escribo, no te llamo, no muestro interés esn lo que me dices) fallan, es ser brutalmente honestos. Es mejor arrancar la curita de un halón.

Después del terrible baño de agua fría, viene la parte de la fuerza de voluntad. Entienda que la persona herida NO QUERRÁ SER SU AMIGA y que el que usted crea que brindándole "su amistad" le está haciendo un bien, no implica que necesariamente así sea. Espere que las heridas sanen y todo vuelva a su equilibrio natural.

El que lo siente al doble: El(La) rechazado(a)

No es la mejor forma de llamarlo, no es el mejor status en el que se puede estar, pero es un paso inevitable hacia el aprendizaje.

Sabemos lo mal que se siente ser el que escucha "no eres tú, soy yo, pero podemos ser amigos", pero es bueno saber que el vaso siempre está medio lleno.

El que le hayan dado el ultimatum duele, pero no le deja sabor a culpa ni a remordimiento. No se pregunte "qué habría pasado si...", alégrese porque le dieron luz verde para un nuevo comienzo. Lo mejor es lo que pasa.

Simplemente entienda que si la persona no era para usted, es porque hay otra que sí lo es (o al menos le será más beneficiosa) y afortunadamente, le dejan el paso libre para que llegue. No hubiese sido feliz en una relación mediocre con alguien que se conforma.

Dése un tiempo para autoexaminarse. Vea cuáles pueden haber sido sus errores. No tenga miedo. Corríjalos y aprenda a quererse tal cuál es.


Ya en una nota menos de autoayuda. Es básico en Relaciones 101 que uno siempre tenga por delante que conformarse está mal, que todo el mundo se merece querer y que lo quieran, y que hay que tener las suficientes BOLAS para aceptar cuando hay que dar por perdida una batalla, reagruparse y esperar por la siguiente. No hay nada más rico que un buen reto.

10 de agosto de 2010

Para la próxima

La próxima vez voy a pensar menos y a sentir más.
La próxima vez voy a echarte los cuentos de mi vida, pero no dejaré que mi vida sea sólo un cuento.
La próxima vez voy a abrazarte más.
La próxima vez voy a caminar más despacio, voy a ver el cielo y voy a disfrutar cada momento.
La próxima vez voy a pensar poco en el mañana.
La próxima vez te llevaré a que te conozcan mis padres.
La próxima vez iremos a la playa, a la punta del Ávila y haremos un road trip.
La próxima vez me haré la mejor amiga de tu mamá.
La próxima vez conocerás a mi mejor amiga y a su novio.
La próxima vez me comeré una fresa de tu boca.
La próxima vez veremos películas de Kubrick un domingo lluvioso.
La próxima vez me enseñarás a manejar y te reirás de lo nerviosa que me pongo.
La próxima vez apretaré tu mano mientras me hago el tatuaje que siempre pospuse hacerme.
La próxima vez te confesaré mis miedos, pero te diré que yo sola puedo superarlos.
La próxima vez me vestiré del color que no te gusta, sólo para demostrarte que a mí me queda bien.
La próxima vez iremos al cine y discutiremos la película hasta que no quede ninguna escena sin criticar.
La próxima vez te llamaré "mío" frente a todo el mundo y no me dará pena.
La próxima vez voy a sorprenderte más.
La próxima vez seré un poco más yo, un poco más feliz y un poco más fuerte.
La próxima vez tendrás otro rostro, otro nombre, otro incio y otro final.


... Apenas aparezcas, lo sabré. Mientras tanto, no te espero, pero sé que llegarás la próxima vez.

7 de agosto de 2010

Corto-le-traje #1

¿Si prometo dejarme ser damisela en peligro, puedo tener un príncipe que me rescate?
No, no me importa que use mallas, zapatillas y apueste a los caballos.
Ni que tenga unresolved mother issues con la Reina,
ni que hable de las políticas del castillo los domingos con el Rey,
ni que tenga parientes anfibios que roben besos a otras princesas.
Sólo que me prometa un sólido
"happily ever after"
.


6 de agosto de 2010

Hoy no es igual

Hoy el día no es igual, tampoco yo.
El sol se levantó tarde y se dejó opacar por sus primas las nubes,
las que son grises, rechonchas y celosas,
las que lloran a cántaros la pérdida de su propio brillo.

El cielo no sonríe, pero la lluvia no me moja,
resbala presurosa por la ventana, lejos de mí y de producirme frío.
¿Cómo sé si estoy aquí?
No siento el frío, no escucho la lluvia, no la veo.

Estoy dormida.
Si se puede llamar "dormir" al estado de inmóvil inquietud en el que engaño a mis desvelos.
Ellos son los únicos que no se van, los únicos que son ciertos en los días salpicados de incertidumbre.
Sé que hoy los olvidaré mientras camine y hable, pero que en la noche volverán.
Mis queridos desvelos.

La lluvia arrecia.
Es hora de abrir los ojos.
Ahí está la ventana, ahí está el aguacero, ahí están las nubes, más allá se asoma el sol.
Aquí esta mi cama, aquí está mi cuerpo, aquí está el espejo y aquí estoy yo.

Un día más.
Comienza igual a ayer, quizás igual a mañana.
Un día con sol, nubes y lluvia, con amaneceres, ventanas y desvelos.
Pero yo no seré la misma, estoy aquí hoy, mañana no sé.

Hoy comienzo este día, un día que no es igual, pero tampoco lo soy yo.



Esta foto la tomé yo hace tiempo, no es de Google.-
:)

4 de agosto de 2010

Aclaratoria

Este blog es MÍO, lo que escriba en él no tiene intenciones de ser una explicación científica a los fenómenos de la vida, sólo son pensamientos e interpretaciones MÍAS. Si usted lo que quiere es información verídica, científica y actual, está en el lugar equivocado.

Pero le recomiendo que visite:

- http://www.psychology.org/
- http://www.rae.es
- http://www.bbc.co.uk/mundo
- http://www.imdb.com
- http://www.elpais.com
- http://www.eluniversal.com

Ahí sí encontrará información A+

¡HOWEVER...!

Si no tiene ningún problema con mi forma de escribir y lo que digo, por favor quédese a leer, porque aún quedan muchas cosas más por bloggear en mi enmarañada cabecita.

Sin más que agregar, me despido por ahora con mucho cariño.-

3 de agosto de 2010

Freud me volvió a joder

Sí, cuando no estoy hecha un guayabo andante, es probable que ande haciéndome ilusiones bobas en la cabeza. Así soy yo.

Ya van dos días y cuatro veces que sueño con la misma persona. Afortunadamente (o quizás no) es una persona nueva.

Como otra cosa que me caracteriza es que hasta que no tengo una explicación, no estoy tranquila, me puse a investigar el significado de la aparición de este nuevo individuo en mis sueños.

En su obra La Interpretación de los sueños, Freud (mi fuente de conocimientos favorita) dice que "los sueños son realizaciones disfrazadas de deseos reprimidos."

Antes de continuar, aclaro: mis sueños han sido todos Lenguaje, Salud, Sexo y Violencia tipo A (y quizás B)

Ahora, Freud me lo dejó claro. En dos platos: mis sueños intentan decirme que estoy en vías de inventarme un amor platónico o que -a pesar de repetirme todo el día lo contrario- realmente estar sola y sin perro que me ladre no es mi status quo.

De cualquier forma, sé que este nuevo "asunto" me va a estar persiguiendo por un tiempo y me iré creando interrogantes del tipo:

¿Será que sí me gusta este tipo?

¿Será que yo le gusto o me lo estoy inventando?

¿Qué podría pasar?

¿Y si no le hago caso y me quedo sola?

¿Estaré lista para lanzarme por otro barranco?

¿Serán sólo ganas de estar con alguien?

¿Realmente podría estar con alguien ahora?

And so, and so, and so... 'til the end of the world


¡Gracias Tío Freud! Me acabas de joder la mente de nuevo.

2 de agosto de 2010

Norway is the way

Todas las veces que quiero sonar liberal y despreocupada (por no decir "engañada") sale a relucir la historia del noruego. Pero esa en realidad fue la culminación de una serie de "encuentros" de esos que las damas no cuentan... Pero let's face it, si no se dicen nombres, todo está permitido.

Esto pasó hace algún tiempo, acabábamos de descubrir que en un querido sitcom usaban una táctica llamada el "Have you met...", qué básicamente consiste en llegarle a un desconocido y decirle alguna variante de esta frase: "Hola, ¿conoces a [INSERTE NOMBRE DE AMIGO/A AQUÍ]?" (Hi, have you met...?) y echar el resto a la suerte.

Pao, mi amiga, siempre tuvo la necesidad imperiosa (y groupie-like) de experimentar el "Have you met". Así que, un día cualquiera en el cafetín de la universidad -cuando nos creíamos demasiado intensos para mezclarnos con la plebe en La Feria- decidió intentarlo con mi amor platónico de Ingeniería, a quién nos referiremos como Espalda Sabrosa. La cosa más o menos pasó así:

Pao: ¡Ya vengo, Lau! (Se para de la mesa, sale e intercepta a Espalda Sabrosa) ¡Hola, tengo una amiga que te quiere conocer!
Él: Eeehhh... ok (Realmente no era un hombre de muchas palabras y creemos que tampoco actividad cerebral)
Pao: (llegando a la mesa donde yo estaba a mitad de un arroz chino) ¡Es ella!
Yo: (boca abierta, tenedor en la mano, mirando hacia arriba) *balbuceo incomprensible*
Él: (incómodo y con voz mucho menos sexy que su espalda) Ehhh... Gustavo... Mucho gusto...
Yo: *balbuceo* Laura *más balbuceo*


Acto sucesivo, salió del cafetín para -literalmente- nunca más volver en los años de carrera que me quedaban. Al sol de hoy, le sigo echando la culpa al arroz chino que me restó sex appeal.

Sin embargo, si pensaron que Pao se rendiría, se equivocan.

En esa oportunidad -la del noruego- decidimos ser el grupo de rebeldes universitarios que se van a rumbear un miércoles (mi excusa fue hacer networking, pero más que todo fue rumbear y ya) Llegamos al local y yo, muy elegantemente, voy a instalarme en la barra (tenía un crush con un bartender) La noche pasa... y pasa... y pasa... y sigue pasando sin que pase nada. Comenzaba a aburrirme.

Eran como las 4am y ya el local comenzaba a vaciarse; sin embargo, aún quedaba un tipo, que a falta de una mejor forma de describirlo, era EL tipo: espalda ancha, ojos claros, bailaba como dios, bien vestido, barba de hace dos días... ¡Todo un colirio!

Yo: Pao, me encanta ese tipo. ¡Le quiero meter!
Pao: Ok... ¡Ya vengo!
Quizás si no hubiese estado estacionada en la barra tanto rato, recordaría con más detalles lo que pasó después. Pero no me queda duda de que en algún lugar de esa discoteca ocurrió un ataque "Have you met" style, porque aunque usted no lo crea -a mí aún me cuesta- aquel tipo llegó hasta donde yo estaba desplegando una sonrisa "ameisin" a preguntarme si quería bailar.

Ok, la música electrónica no se baila como la bailamos nosotros, pero para los efectos de ese día, hubiese bailado pegado hasta un heavy metal.

En el interín recuerdo que hablamos -no lo recuerdo muy bien- algo referente a que me había estado viendo toda la noche, pero que pensaba que si se acercaba a mí lo iba a rebotar. Lo único que recuerdo distintivamente fue que, luego de identificarse con algún nombre, me dijo: "Es que yo no vivo aquí, vivo en Noruega y me voy en una semana"... El tipo estaba tan poco comprometido con lo que pasaba como yo, tan TAN poco que me lanzó esa mentira para asegurarse que no nos veríamos bajo la luz del día y en estado sobriedad (darle un número de teléfono falso, fue sólo precaución) Could this get any better?

Sí, sí podía ponerse mejor: el tipo no sólo era guapo y pasajero, sino que besaba tan bien como bailaba. Best make out session EVER!

Después de eso, nos despedimos y cada quién agarró su camino (cabe destacar que rechacé una sugerente invitación a ir "a otro lado")

Evidentemente, después de los acontecimientos, la ronda de preguntas, respuestas y joda post-alcohol con mis amigos en la arepera fue excelente.

Desde ese día siempre se hablará de "la noche del noruego" como un logro personal de Pao y mío: ella porque lo hizo posible y yo porque lo consumé con honores (modestia aparte, I did a very good work).

Ese noruego no lo sabe, pero se convirtió en referencia obligada para mis despechos y mis noches de rumba.

Aún hoy, en este momento de mi vida, recuerdo ese día y pienso: "¿Quién necesita un clavo cuando se puede tener un noruego?"